Los Aztecas solían cocinar sus carnes con frutas tropicales originales de su tierra, entre estas frutas que ellos utilizaban estaban la piña y la papaya... ¿era solo por un aporte de sabor o habían otras intenciones al utilizarlas?
Uno de los platos más conocidos al día de hoy utilizando piña, es la pierna de cerdo asada con ella, o los famsos tacos al pastor, donde ponen una piña en la parte superior del trompo mientras lo asan, también el pavo de navidad, que en muchas recetas suelen ponerle piña, y asi un sin fin de recetas.... y ¿Cual puede ser la razón, aparte de aportar un sabor?... pues simple, no sé si lo han notado, pero las carnes que son cocinadas con la piña quedan mucho más suaves y jugosas... se ablandan, esto se debe a que existe una enzima, éstas son moléculas que favorecen diversas reacciones en los seres vivo. Se encuentran en todas las células vivas y, entre otras cosas, en el zumo de piña y de la papaya. Estas enzimas específicas de la piña y de la papaya (llamada bromelaina y la papaína respectivamente) tienen una propiedad en particular, son proteolítica, refiriéndose esto a que degrada las proteínas.
La carne es compuesta en su mayoría por proteínas y el colágeno, este último es un tipo de proteína y el principal responsable de la dureza de la carne, macerando la carne con los zumos de estos frutos y dejando el tiempo necesario estas enzimas destruyen dicho endurecimiento, si quieren acelerar este proceso de maceración, les recomiendo utilizar una jeringa e inyectar los jugos en pieza de carne, consiguiendo así carnes blandas, más jugosas y por supuesto muy sabrosas.

Imagen sacada de Jupiter Imagenes.